EL COSMOS

LA IMPORTANCIA DEL AGUA COMO COMPUESTO DE LA VIDA

Luis Felipe González Monroy

"El agua es la fuerza motriz de toda la naturaleza." 

Leonardo da Vinci.

El agua a lo largo de los siglos ha sido el elemento principal para la subsistencia humana; si bien el hombre ha aprendido a manejar y dominar los elementos de la naturaleza, el agua se ha consolidado como el compuesto de la vida, la sustancia que da paso a la existencia, es directamente proporcional a la salud y nos permite llevar a cabo la mayoría de actividades diarias que realizamos o de las que nos beneficiamos; sin embargo, a pesar de ser el motor de la presencia de vida dentro de nuestro planeta, suele ser subvalorada, nos limitamos a entender su valor frente a la escasez y no le damos la importancia necesaria como para pensar en su cuidado o preservación.

A partir de esto el presente ensayo quiere demostrar la importancia del agua como el compuesto de la vida, mediante el desarrollo de la siguiente premisa: El agua, como elemento esencial adquiere su importancia mediante la necesidad y no por su utilidad, hecho que debe variar frente a su limitada cantidad, para lo cual se hace necesario establecer un pensamiento ambiental critico por parte de la ciudadanía donde prevalezca su conservación, manejo racional y preservación.

Para desarrollar esta premisa en primer lugar se destacará la importancia del agua como sustancia vital, seguidamente se presentará la concepción cultural y social del manejo del agua para concluir con la necesidad de establecer un pensamiento ambiental que influya no solo en la preservación del líquido sino en un respeto general para la naturaleza, sumado a esto es válido resaltar que el presente escrito se encuentra en dialogo permanente con el libro “El Perro a Cuadros” de Camilo Prieto, en el cual se presenta, como lo evidencia su subtitulo, una mirada verde a una situación ambiental gris; y donde específicamente se tomará el tema del agua acorde al capítulo “El agua, la Guerra y los Mosquitos”, donde se establecen elementos símiles a los presentados en este ensayo.

1. LA IMPORTANCIA DEL AGUA.

El agua en primer lugar es definida como una sustancia necesaria para el desarrollo de la vida dentro de un determinado territorio, esto implica que no solo se convierte en primordial para los seres humanos, sino para los animales, las plantas e incluso en muchos casos para seres inertes que contribuyen a mejorar del desarrollo de una comunidad; pero no necesariamente lo entendemos como tal, como humanos lo hemos asumido de una manera tan natural que muchas veces cuando se nos pregunta frente al concepto del agua nos conformamos con decir su composición química, de este modo dos átomos de hidrogeno y uno de oxigeno se vuelve suficiente para definir el agua. 

Camilo Prieto, como lo señalábamos antes, en su libro “El perro a Cuadros” hace una referencia a la concepción del agua desde la antigüedad, de este modo en primer lugar nos presenta la visión de Tales de Mileto; donde es entendida como un precioso fluido que se podría considerar la esencia del mundo; sin embargo y a pesar de que la referencia filosófica puede ser un poco utópica desde el punto de vista de la composición del mundo, es relevante entender que el agua si se constituye como el punto inicial y de partida de la vida; para nadie es un secreto que el planeta representa un porcentaje de 66,6% agua; sumado a esto y como lo presenta Prieto desde su visión medica  nuestro propio cuerpo está compuesto en su mayoría por agua; y una disminución de su nivel en proporción macro o  desde la visión del ser humano, genera un desequilibrio general dentro del funcionamiento  de cualquier sistema.

En este punto es donde se evidencia la importancia del preciado líquido, sin agua ni siquiera podríamos contar con un funcionamiento adecuado de nuestro cuerpo, la necesitamos para poder comer, desarrollar nuestras actividades cotidianas, contar con un grado de salubridad adecuado, la necesitamos sencillamente para vivir, pero esto aún se torna insuficiente si la contrastamos con  la importancia que se le da a la tecnología, la luz eléctrica o el dinero; aspectos sin los cuales muchas personas han logrado vivir; la pregunta es hasta cuando la seguiremos subvalorando y cuando entenderemos realmente su importancia, aun cuando se puedan establecer acciones o simplemente cuando afecte nuestros amados “factores importantes”, es decir, cuando el dinero se vea reflejado en altas cantidades para una pequeña porción de agua o sea más relevante su uso que la de un computador o un celular; sin embargo para poder dar respuesta a estas suposiciones, es necesario entender el concepto social y cultural del agua, lo cual se expondrá en el siguiente aparte.  

2. LA CONCEPCION HIDRICA SOCIAL Y CULTURAL

Camilo Prieto cuando nos presenta la concepción del agua, evidencia que para nosotros se ve reflejada en aquel líquido que sale del grifo cuando lo necesitamos, no conocemos cuál es su proceso, tratamiento o uso correcto; y lo adherimos tanto al tema cotidiano que no somos conscientes de cuánta agua se desperdicia solamente al dejar la llave abierta cuando nos cepillamos los dientes o lavamos la loza; sin embargo el tema a pesar de sonar repetitivo en los últimos años y de escuchar la preservación del agua como algo que se debe hacer, y que obviamente la mayoría no hace, es un tema que requiere medidas urgentes, si no la escases se va a hacer realidad y no vamos a tener más remedio que aceptar las consecuencias de nuestra irracionalidad.

El agua, como se ha mencionado múltiples veces, es un recurso escaso, no se puede garantizar su suministro por todos los años que se necesite y su mal uso también genera graves consecuencias para nuestra preservación; Prieto nos muestra como el agua es generador de enfermedades, en su relato frente al nacimiento del río Bogotá, evidencia que la cantidad de mosquitos transmisores de enfermedades como el Dengue o la Malaria, provienen de aguas sucias, residuales, desechos industriales entre otros, que como lo evidencia son el juego de los niños, exponiéndolos aún  más enfermedades y minimizando la calidad de vida de la población; sumado a esto el agua misma es generadora de enfermedades, sus altos contenidos de metales (plomo, cromo, mercurio, entre otros) afectan la salud de los seres vivos; lo cual se complementa con el poco mantenimiento que se le da a los acueductos y suministros de aguas, lo que en muchas partes del país evidencia hasta materia fecal en el agua que consumimos para bañarnos y comer.

Frente al tema de la escasez no estamos conscientes de su realidad, Colombia es un país privilegiado en recursos naturales, la cantidad de ríos y lagos presentes en el territorio es muy superior a países como Francia o  regiones del África, y solamente retomamos el tema de la escasez cuando los noticieros obtienen noticias polémicas y amarillistas por la muerte de niños en la Guajira por Inanición y por falta de agua; y ahí es donde aparece el término que solemos pensar imposible, pero que se da dentro de la misma Colombia; donde los niños y las personas en general mueren deshidratados, y los que tienen la forma o el dinero para garantizar su agua desperdician el fluido de manera irracional e irresponsable. 

En este punto se evidencia el mercado del agua, el aspecto dinero garantiza el acceso al fluido, lo que nos hace compradores de un líquido que realmente no tiene dueño, pero que para nosotros lo convierte en un producto más, de este modo cuando llegan las facturas por el servicio suministrado somos los compradores más racionales, y muchas veces cuestionamos el valor del preciado líquido; pero cuando no pensamos en el pago lo desperdiciamos y lo subvaloramos; este valor vuelve a aparecer cuando lo compramos en el supermercado o en la tienda, ya que el agua también se vende empacada; pero este valor lo determinan las multinacionales que siguen haciendo negocio con el líquido vital, Prieto nos presenta una comparación racional y cuestionable desde cierto punto de vista donde a partir del precio del agua embotellada se evidencia un costo más alto que el valor de la gasolina, lo cual es totalmente verídico; sin embargo esta afirmación es cuestionable ya que el valor no solamente es el del agua, sino el de su empaque, el plástico que contiene el líquido preciado, lo cual es paradójico, la vida envasada en aquello que degrada la vida; pero que eleva su costo, y no es difícil de demostrar, el agua en bolsa es mucho más económica  que el agua en botella o galón; lo cual evidencia que el valor del agua es relativo, los bienes que complementan el bien principal son los que determinan su precio real.

El problema real es cuando el dinero ya no pueda comprar el agua, cuando la escasez sea inminente y realmente le demos importancia a aquello que nos daba la vida; un caso no muy lejano lo vivimos a finales del 2015, el fenómeno del niño afectaba nuestro país, y las malas administraciones fueron visibles, en el caso de mi municipio, de Facatativá; no se planeó el manejo del recurso hídrico, los recursos que se tenían se agotaron, la represa quedo totalmente seca y no había agua para el municipio, ni el estrato 6 ni el estrato 1 contaban con el preciado líquido, esta noticia encabezo muchos noticieros nacionales, se presentaba en la tienda escasez del agua en bolsa, y la respuesta fue suministrar agua mediante carro tanques, la cual no se encontraba en excelentes condiciones, lo que género que el primero de enero del 2016 las personas no estuvieran celebrando como siempre el año nuevo sino que estuvieran en filas interminables tratando de recoger valdados de agua para mínimo poder comer.

Y solo en ese punto, cuando ya el dinero no sirve, cuando los medios se acaban, cuando realmente se necesita, es que aparece la importancia del agua, aparecen los comentarios de porque no la cuidamos y aparece el uso racional que se debió dar, pero como dentro de nuestra cultura asumimos tan bien las consecuencias, la culpa fue de la mala administración, la culpa no la tuvimos nosotros por ser derrochadores y no cuidar el agua; la culpa fue de otros que no supieron hacer lo que debimos hacer, y de la corrupción política; que si bien es uno de los culpables directos no es el único; la corrupción política por el apreciado dinero ha vendido parte de nuestros recursos o a dado el aval para contaminarlos; de este modo los páramos, ríos y lagos e incluso nuestra maravilla natural Caño Cristales, están siendo amenazadas por la industria, la minería y las construcciones que seguramente para la corrupción se traducen en dinero, que en la actualidad es lo más  importante para la vida de algunos, pero que genera consecuencias en todos, y donde nosotros no nos manifestamos porque nos sigue llegando el agua por el grifo.

Es por esto que es necesario cambiar el concepto social y cultural que se tiene del agua, generar medidas críticas y proponer soluciones que eviten la crónica de una escasez anunciada.

3. PENSAMIENTO AMBIENTAL COMO RESPUESTA SOCIAL.

A lo largo del escrito se ha hecho un recorrido por el agua, su importancia, su precio y su subvaloración; pero esto necesita medidas urgentes, y no solo por los ambientalistas; que según el más reciente informe son matados en cantidad en nuestro país, siendo el tercer país que mayores muertes presenta; sino por cada uno de los individuos que hacen uso del agua; es por esto que en primer lugar se hace necesario generar consciencia ambiental, un pensamiento ambiental critico que nos permita conocer la situación real del ambiente y permita tomar medidas tanto fáciles como sustanciales que generen impactos positivos.

Como lo diría Prieto, debemos convertirnos en perros a cuadros, romper los estereotipos sociales y generar acciones en pro de la vida y no en pro del modelo capitalista en el que nos encontramos, dándole importancia al recurso hídrico, a la protección de páramos, manglares, ciénagas, ríos y lagos; y sensibilizando en primer lugar a los colombianos, siendo un referente mundial, mediante la educación ambiental en redes sociales, medios de comunicación y todo aquello que nos permita generar acciones ambientales positivas; bajar los índices de derroche y desperdicio de agua y demostrar que los seres humanos podemos hacer uso racional de los recursos, no asumiéndolos como propios y entendiendo que no somos dueños de la tierra, ella es la que nos posee a  nosotros. 

Pero este pensamiento ambiental solo va a ser propicio en cuanto lo asumamos como cultura, donde se respeten todos los seres vivos y los recursos naturales, y comprendamos que el porcentaje de vida sin naturaleza es nulo; entendiendo la importancia del agua y amando a aquello que nos da la vida, al agua el componente esencial de la vida.